I.
CONCLUSIÓN.
Vivimos en un período de transición entre una sociedad
industrial y una sociedad de la información. Las escuelas tal como las
conocemos están diseñadas para preparar a las personas para vivir en una
sociedad industrial. Los sistemas de educación preparan a las personas para
ocupar un lugar en la sociedad imitando a las fábricas y oficinas de una
sociedad industrial. Diariamente, en todo el mundo, los jóvenes utilizan
bicicletas, colectivos, automóviles o trenes para ir a la escuela, exactamente
lo mismo que harán más adelante para ir a trabajar. Se supone que tendrán que
fichar a una hora concreta y aprenden a trabajar en los pupitres de las aulas
que son exactamente iguales a las oficinas de la industria y el comercio. El
modo en que se administra el tiempo, en que se dividen las asignaturas para su
estudio y en que se organizan las escuelas como burocracias son anticipaciones
de la vida después de la escuela. Cuando suena el timbre al finalizar el día
escolar, los alumnos salen corriendo para trasladarse a casa, exactamente igual
a lo que hacen los trabajadores de las fábricas y oficinas aproximadamente una
hora más tarde. Una sociedad industrial depende del movimiento físico de las
personas y los bienes, de manera que la infraestructura tecnológica fundamental
es el ferrocarril, las rutas, el mar y el transporte aéreo. La infraestructura
tecnológica fundamental de una sociedad de la información es sin embargo, la
red de telecomunicaciones. Para preparar a las personas para vivir en una
sociedad de la información, se necesita un sistema educativo que se base en las
telecomunicaciones y no en el transporte.
Hoy en día, si se quiere hablar con alguien que no se
encuentra presente, tenemos dos elecciones que representan las diferentes
formas de hacer las cosas en una sociedad industrial y en una sociedad de la
información: ir a verlo o llamarlo por teléfono. Utilizar una red de transporte
o una red telefónica. Es raro tener una elección similar en educación. Si se
tiene que asistir a una clase hay que viajar hasta el aula. La educación
precisa una alternativa. Alumnos y maestros deberían poder tener la opción de
reunirse para la instrucción por medio de las telecomunicaciones o del transporte”.
Esta es precisamente la lógica subyacente al desarrollo de propuestas
educativas en Internet: las nuevas tecnologías presentan a priori una
posibilidad de elección entre la educación presencial y la educación virtual.
Garantía de eficacia en los procesos de enseñanza aprendizaje en la educación superior?
Estamos
consientes de que el camino por recorrer aún es muy largo;
necesitamos que la utilización de recursos técnicos sirva para dar un cambio
sustancial al currículo y la práctica docente. Aún tenemos que buscar la manera
de cambiar la cultura de los alumnos que buscan más bien la convivencia, el
socializar con otros compañeros, el tener el contacto directo con sus
profesores, el estar sujetos a un horario y un espacio; haciéndoles notar de
los beneficios que las tecnologías pueden otorgarles, aunque empiezan a notarlo
ya; no ha sido suficiente, hay que trabajar más en el sentido de que ellos
sientan que la tecnología les abre las puertas a un autoaprendizaje, a una
interacción independiente del tiempo y del espacio y a experimentar el
desarrollo de habilidades de aprendizaje que no conocen o que aún no ponen en
práctica.
El desarrollo tecnológico logrado por la humanidad le
permitió abandonar por primera vez la superficie terrestre en la década de
1960, iniciando así la exploración del espacio exterior.
Las nuevas tecnologías son nuevas porque, en lo sustancial,
han aparecido – y, sobre todo, se han perfeccionado, difundido y
asimilado-después de la Segunda Guerra Mundial. Desde entonces su desarrollo se
ha caracterizado por una fuerte aceleración; sus consecuencias son de una
magnitud y trascendencia que no tenían antecedentes. Si recorremos listas de
nuevas tecnologías (NT) preparadas en Singapur, México, Tokio, Boston o Buenos
Aires, podemos sorprendernos de que algunas no tengan más de tres líneas,
mientras que otras cubren varias páginas. Pero, si estudiamos estos listados,
veremos que – más allá del detalle o de sus diferentes objetivos - la mayoría
coincide en destacar tres NT: las biotecnologías (BT), las de los nuevos
materiales (NM) y las tecnologías de la información (TI). Esta síntesis deja de
lado otras NT –como algunas ambientales, las energéticas o las espaciales- pero
agrupa a las de mayor difusión y en las que se manifiestan con mayor claridad
los efectos que más nos importan. Las NT se alimentan de producción científica
más avanzada, a la que se suele definir como la que constituye la frontera del
conocimiento. Por eso también se habla de Tecnologías de punta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario